miércoles, 8 de julio de 2015

No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas; by Laura Norton

Si estás leyendo estas líneas es que te ha llamado la atención el título.

¿Te gustaría decírselo a alguien?
¿Serías capaz de decírtelo a ti mismo?


Y lo más importante:

¿Te gustaría mantener durante un buen rato la sonrisa que se te ha quedado en la cara?

Pues esta es tu novela.

Te podríamos contar con más o menos gracia de qué va la cosa, para que te hicieras una idea: que si la protagonista, Sara, es muy maja, que si tiene un trabajo muy interesante (es plumista, ¿a que nunca lo habías oído?), que si es un pelín obsesiva y alérgica a los sobresaltos...

Por supuesto, la vida se le complica y se encuentra con que su piso se convierte en una especie de camarote de los hermanos Marx cuando en la misma semana se meten a vivir con ella su padre deprimido, su hermana rebelde y su excéntrico prometido y, sobre todo, el novio al que lleva mucho tiempo sin ver...

Pero mejor no te lo contamos porque te gustará leerlo. Lo único que necesitas saber es que, desde el título, te garantizamos unas cuantas horas de descacharrante diversión como hacía tiempo que no disfrutabas.


No sé que decirles sobre éste libro, a mí me encantó. Me encantó, pero no me divertí mucho. No me causó gracia, o sea que no logró ese objetivo, pero una buena historia es una buena historia, y esta claramente lo es. Me gustó, me dejó pensando, y sí, me pareció divertida en varias ocasiones. Hacerme reír con un libro es difícil.
Si lo que buscan es partirse de risa, les recomendaría leer la saga Charley Davidson, de Darynda Jones (#ReyesEsMíoNoLoToquen), no ésta. Pero si buscan una buena historia, sobre la vida, la realidad, que uno a veces tiene que partirse el culo trabajando, y que hay que hacerse cargo de que no es culpa del karma (es culpa tuya, por gilipollas. Aunque no te pongas toda molesta con vos mísma y mejor hacé algo al respecto, ni tampoco te culpes demasiado), bueno entonces ésta es tu historia.
xoxo

Malena Winderbaum