
Las cosas son diferentes ahora. Los científicos son capaces de erradicar el amor y el gobierno exige que todos los ciudadanos reciban la cura al cumplir los dieciocho años.
Lena Halloway siempre ha mirado con interés el día en el que ella sea curada. Una vida sin amor es una vida sin dolor: Segura, precavida, fiable y feliz.
Pero a noventa y cinco días antes de su curación, Lena hace lo imposible: Se enamora.